Historia del Fuerte San Martín
El Fuerte San Martín fue construido a comienzos del siglo XVII. Su origen fue una batería en principio dotada de cuatro cañones, llamada de “San Martín” haciendo honor a la ermita preexistente. Se desconoce la fecha de fundación, aunque se tiene noticia de su existencia desde 1614. Hay una cita en la que se dice que fue tomado al asalto en 1639. Fue quemado, reconstruyéndose en 1668 por el pueblo de Santoña, sin embargo sufrió diversas modificaciones y reconstrucciones posteriores dependiendo de quién ocupara la plaza militar santoñesa, como las documentadas en 1794 y en 1870, la primera realizada por el ejército francés.

Construido sobre un promontorio a la entrada de la bahía de Santoña, el Fuerte San Martín domina a la vez la canal de entrada al puerto y el núcleo más antiguo de la villa. Tiene una superficie de 2.700 metros cuadrados con una planta en forma de herradura, dos pisos, terraza y patio, donde está la denominada Casa de los Oficiales, de planta rectangular. El cuerpo cilíndrico en el patio, con escalera de caracol, comunica ambos pisos. El edificio es de piedra de sillería arenisca por el frente sur y de caliza por el frente oeste, aunque se emplea el ladrillo en los vanos. Se accede a la fortificación por un arco con una gran cancela de hierro, con una inscripción de la época de Isabel II.

Según M. A. García Guinea, es probablemente la única edificación conservada del sistema Carnot. Respecto a sus características bélicas, fue la segunda barrera de fuego en la falda del monte Buciero, con hasta 43 cañones de gran calibre, formado por dos órdenes de fuegos acasamatados, con una terraza superior donde también se colocaban cañones y obuses.
A los pies del Fuerte San Martín se situaba una muralla (actualmente desaparecida) levantada en los primeros años de la década de 1860. Ésta formaba parte de un proyecto mucho más ambicioso que pretendió cerrar los flancos sur, oeste y norte de la villa. Más tarde, 1895 la Muralla Sur, con sus baluartes, se juzgó como inútil. Mientras que, en 1907, ya era considerada una ruina.
En 1986, el Fuerte San Martín se rehabilitó para dedicarlo a sede de la Escuela Taller. Y en mayo de 2008 se hizo un proyecto de rehabilitación para convertirlo en museo de recursos naturales y arquitectónicos del monte Buciero. El mismo taller intervino en la limpieza, restauración y consolidación de las fachadas y accesos del fuerte.
En 1992 fue declarado Bien de Interés Cultural con categoría de monumento.
Actualmente es propiedad del Ayuntamiento de Santoña. Está reconstruido y rehabilitado para Centro Cultural y para sede de la Escuela-Taller de Rehabilitación del Patrimonio.
Visitas al Fuerte San Martín
Durante el verano, suele abrir del 15 de julio al 31 de agosto en horario de 11:00 a 14:00 h. y de 18:00 a 21:00 h. de lunes a domingo. La entrada (3€) da derecho al acceso a la fortificación y a las cuatro exposiciones del interior. El acceso no es por la puerta principal, sino por la superior de la terraza, subiendo la cuesta. Consultar con la Oficina de Turismo de Santoña: 942 66 00 66 oficinadeturismo@turismosantona.com
Exposiciones en el interior
Si de verdad estás interesado en la historia napoleónica y las fortificaciones, más que estas exposiciones te recomendamos el Tour teatralizado por la Santoña napoleónica, que incluye la historia de este fuerte y la visita al interior del Fuerte San Carlos. Además de desvelar los secretos de la “Gibraltar del Norte”.
Santoña Vida en el Agua
Recoge parte de los contenidos expuestos en el Pabellón de Cantabria de la Expo del Agua celebrada en Zaragoza en el año 2008. Representa el compromiso de una región preocupada y ocupada en la defensa del medio ambiente y la vinculación de Santoña con el agua, como elemento que ha determinado la historia, la economía y la cultura de la villa.
Santoña Plaza Napoleónica
Acerca al visitante la importancia de Santoña como uno de los puntos vitales para la estrategia francesa de control del norte de la Península Ibérica durante la Guerra de la Independencia Española.
Santoña la mar y Pioneros del Índico
Comparten la misma temática, la mar. La primera, la vinculación de la villa santoñesa con el mar y el homenaje a todos aquellos hombres y mujeres que han trabajado y siguen trabajando en el sector conservero. La segunda, un recuerdo a la veintena de pescadores santoñeses que el Gobierno de España envió en 1981 a las islas Seychelles, en el océano Índico, con el objetivo de estudiar las posibilidades de pesca de túnidos en esa zona. A bordo de estos barcos, el ‘Bahía de Santoña’ y el ‘Nuevo Madre del Cantábrico’, de Guetaria, estos marineros se convirtieron en los pioneros en abrir este caladero.
Donde las sirenas cantan con los grillos, Santoña, un himno a la belleza.
Exposición fotográfica de Santoña realizada por el fotógrafo Arnaud Späni.

Fuentes: Wikipedia, turismodecantabria.com, turismosantona.com, santonaenruta.com, cantabriaconhistoria.wordpress.com
Cómo llegar al Fuerte San Martín
Se puede acceder de dos maneras:
- A pie a través de las escaleras situadas bajo el fuerte en la zona de El Pasaje (paseo marítimo).
- En coche o a pie a través de la calle Monte, subiendo la cuesta (solo a pie) que culmina en el fuerte. A partir de esta subida el acceso en coche solo está autorizado para residentes. Se puede aparcar cerca, detrás de la iglesia de Santa María del Puerto, entre C/ Rey y C/ San Miguel. Ver Dónde aparcar en Santoña.